Bienestar Social y Familia

El IAJ distribuye en Tarazona un millar de pulseras para detectar si una bebida ha sido adulterada

El reparto gratuito se ha realizado en la plaza San Francisco, en el marco de las fiestas de San Atilano, antes de la salida del Cipotegato este miércoles

Este martes se han distribuido en Tarazona casi 1.000 pulseras de detección de químicos en una acción impulsada por el Instituto Aragonés de la Juventud que ya se desarrolló en Teruel y en Huesca. El reparto se enmarca en una campaña contra el spiking, la acción de alterar una bebida con sustancias psicoactivas sin el consentimiento de la persona que va a ingerirla.

La gerente del IAJ, Cristina Navarro, ha estado acompañada en el punto de distribución, en la plaza San Francisco, por el concejal de Juventud del Ayuntamiento de Tarazona, Pablo Escribano, y por representantes de la asociación de jóvenes turiasonenses Bendita Juventud. Las pulseras que se han distribuido –978 en total– pueden utilizarse desde ahora y hasta final de año: permiten un solo uso y, de no llegar a producirse, la persona que la porte puede quitársela y ponérsela las veces que necesite gracias a un broche.

Estas pulseras-centinela actúan como elemento disuasorio y su distribución gratuita sirve para extender y normalizar su uso entre los jóvenes e incorporarlo a sus espacios de ocio con un doble objetivo: la prevención y la sensibilización. Los dispositivos permiten detectar si una bebida ha sido adulterada con sustancias de sumisión química.

Las instrucciones para testar una bebida recomiendan tener las manos limpias y secas para evitar la contaminación del área de prueba; a continuación se ha de colocar una gota de la bebida en el área designada de la pulsera y esperar entre 3 y 5 segundos para que los resultados aparezcan.

La pulsera incluye las instrucciones detalladas de cómo aplicar la prueba y las indicaciones necesarias para interpretar el resultado si llega el caso de utilizar el test.