El equipo liderado por IDOM rehabilitará el edificio de los antiguos juzgados para convertirlo en el nuevo Centro Goya

El equipo formado por IDOM, BAU y Boris Micka Group (BMG) será el encargado de rehabilitar el edificio de los antiguos juzgados de la Plaza del Pilar en Zaragoza para convertirlos en el nuevo Centro Goya que impulsa el Gobierno de Aragón. Este equipo, con su propuesta, ha resultado ganador del proceso de licitación puesto en marcha para la contratación conjunta de la redacción del anteproyecto, del proyecto básico y el proyecto de ejecución y dirección de obra para recuperar las instalaciones y crear este espacio dedicado al pintor aragonés.

Así lo ha dado a conocer este lunes en rueda de prensa el director general de Cultura, Pedro Olloqui, para destacar que este proyecto se inscribe en el itinerario de acciones previstas en el marco del bicentenario del fallecimiento de Francisco de Goya, que se conmemorará en 2028.

“La celebración no es exclusivamente un punto de llegada, sino un itinerario a recorrer” en el que el Ejecutivo autonómico ya ha dado sus primeros pasos con hitos tan relevantes como la inauguración de la exposición ‘Goya, del Museo al Palacio’ o la adquisición y presentación del retrato de José de Cistué y Coll, barón de la Menglana, pintado por Goya y que ya puede verse en el Museo de Huesca.

El Centro Goya que se ubicará en los antiguos juzgados es una “pieza fundamental” en este proyecto del bicentenario. “Si Goya es lo que es, el mayor mito de la historia del arte, es por ser aragonés” y solo conociendo al genio desde Aragón se podrá comprender al artista y su obra, ha recalcado. La rehabilitación del edificio correrá a cargo de un equipo “con tres patas brillantísimas”, ha dicho el director general, al estimar que su implicación en esta iniciativa “nos da enormes garantías de éxito”.

En representación de IDOM, el responsable del área de arquitectura y profesor de la Universidad San Jorge, Antonio Lorén, ha agradecido al Gobierno de Aragón y a la Dirección General de Cultura la selección de su propuesta. “Cuando tuvimos la oportunidad de abordar un concurso de estas características no solo nos motivó poder trabajar sobre el personaje y la obra de Goya en la plaza del Pilar, sino la oportunidad de unirnos con Borobio Arquitectura y Urbanismo y con Boris Micka Group”, ha dicho.

Un trabajo que abordarán desde varias escalas teniendo en cuenta “la lógica aragonesa que se entiende desde la nomenclatura del edificio, Centro Goya”; su presencia en la plaza del Pilar y “entenderla como una sucesión de espacios para contemplar la obra de Goya”; la aproximación al edificio de Regino Borobio y el objetivo de “reequilibrar la plaza y que la zona oeste empiece a tener una carga importante desde el punto de vista cultural”.

El arquitecto y doctor en Historia del Arte, Javier Borobio, de BAU, ha considerado que este proyecto “es una oportunidad brutal” para reivindicar la figura de Goya y “esa visión como aragonés, que marcará la diferencia con el resto de actuaciones que, de cara a 2028, se pueden ir programando”. Ha elogiado la nueva vida que se le dará al edificio de los antiguos juzgados, al que el equipo sacará “el máximo posible”.

Arquitectura racionalista

El edificio de los antiguos Juzgados de Zaragoza, obra del arquitecto Regino Borobio Ojeda, es un referente de la arquitectura racionalista del siglo XX. El Centro Goya ocupará el ala oriental del equipamiento, que consta de seis plantas, una planta baja porticada dividida en dos alturas, y cuatro plantas superiores. 

La propuesta del equipo ganador para este edificio equilibra la conservación del patrimonio arquitectónico con la incorporación de nuevas tecnologías y materiales que permiten su adaptación a nuevos usos, respetando los valores formales y estructurales del proyecto de Borobio y preservando sus elementos más característicos. En este sentido, se respetarán las fachadas y se actuará en el interior del inmueble.

En la planta baja se propone situar el acceso desde la plaza del Pilar, con una zona de recepción y tienda; en la primera planta (entreplanta), las oficinas y espacios privados del museo; en la segunda planta, plantean situar una sala de usos múltiples; en la tercera, la sala de exposiciones temporales; y en las plantas cuarta y quinta, la ubicación de las salas dedicadas a Goya.

La propuesta arquitectónica ha sido elaborada bajo los principios de sostenibilidad, solidez, versatilidad de uso, durabilidad de elementos, calidad, sobriedad y armonía. El equipamiento garantizará una coherencia estética en todas las salas y una imagen unificada, si bien se dará carácter propio a cada espacio con diseños exclusivos.

La museografía planteada, además de permitir la exposición de piezas y obras de diferente formato y maneras de ser exhibidas, se adecúa a las características arquitectónicas y constructivas del inmueble, sacando el máximo partido a cada una de las estancias, según su disposición de vanos, ventanas y balcones, impuestos por la estética del edificio.

Una experiencia tridimensional

Se busca crear un discurso museográfico que permita al visitante disfrutar de una experiencia narrativa tridimensional: una que combine el entorno urbano, la arquitectura del espacio y el universo de Goya. Así, se maximiza la interacción del público con el lugar, enriqueciendo su comprensión y apreciación del patrimonio cultural.

La superficie útil total del edificio será de 2.433,69 metros cuadrados, distribuidos en: 313,80 metros cuadrados de planta baja; 250,90 metros cuadrados en la primera; 421,93 metros cuadrados en la segunda planta; 445,69 metros cuadrados en la tercera; 440,39 metros cuadrados en la cuarta; y 408,59 metros cuadrados en la quinta planta; así como 152,39 metros cuadrados en la planta bajocubierta.

Aunque la propuesta museográfica se elaborará en la fase de proyecto, y con la supervisión y dirección de los técnicos de la Dirección General de Cultura, en el planteamiento del equipo ganador del proceso de licitación se avanza una serie de ideas. Entre ellas, ofrecer una inmersión profunda en el universo creativo del pintor, acercando su legado a las nuevas generaciones con un enfoque dinámico y multisensorial.

En este sentido, y como ejemplo, se ha avanzado que la fachada será un imán visual con la instalación de banderolas verticales creadas con una malla LED de alta definición que permitirán un juego constante de imágenes cambiantes para captar la atención de los visitantes desde toda la plaza.

El total del presupuesto de la obra civil estimado es de 2.145.820 euros; el total del presupuesto en equipamientos previsto asciende a 59.180 euros; mientras que el total estimado para el presupuesto de museografía es de 2.295.000 euros. El presupuesto total suma 4.500.000 euros, antes de gastos generales, beneficio industrial e IVA.

Una vez firmado el contrato, el equipo tendrá un mes para entregar el anteproyecto; tres meses para redactar y entregar el proyecto básico; y seis meses para la entrega del proyecto de ejecución. Bajo la supervisión del Gobierno de Aragón, el director del proyecto será Antonio Lorén Collado (IDOM), el codirector será Javier Borobio Sanchiz (BAU) y de la museografía Boris Micka.

Acreditada experiencia

El equipo de trabajo tiene experiencia en proyectos complejos, conocen el inmueble y tienen experiencia acreditada en diseños e instalaciones museográficas similares, tanto en Zaragoza como en otros puntos del mundo.

IDOM, con sede permanente en Aragón desde 1965, cuenta actualmente con 120 profesionales, entre arquitectos, ingenieros y consultores. En la capital aragonesa ha realizado numerosos proyectos, destacando en los últimos años algunos de ellos que han obtenido varios premios y galardones, como el Edificio de Servicios Generales de la Universidad San Jorge, la rehabilitación del Pabellón Puente y el edificio de I+D+i de la papelera SAICA, todos ellos ejemplos de sostenibilidad y eficiencia energética en la edificación.

Por su parte, BAU es un estudio de arquitectura con sede en Zaragoza, dirigido por Clara, Sonsoles y Javier Borobio Sanchiz, tres hermanos que continúan con el legado familiar y profesional centenario que se inició a principios del siglo XX con los arquitectos Regino y José Borobio Ojeda, y, después, con los hermanos Luis y Regino Borobio Navarro. Regino Borobio Ojeda fue quien realizó el proyecto para la plaza del Pilar y, veinte años más tarde, también el proyecto y la dirección de obras del antiguo edificio de los juzgados.

La intervención en patrimonio es una de sus áreas de especialización. En la misma plaza del Pilar llevaron a cabo el conjunto de la Casa de la Iglesia, el Palacio Arzobispal y el Museo Diocesano, que desarrollaron junto con el proyecto museográfico ideado por el estudio de Boris Micka.

BMG (Boris Micka Group) es una firma de diseño que se destaca en la creación de experiencias transformadoras a través de diversas disciplinas. Dirigido por el fundador y arquitecto principal, Boris Micka, el equipo está compuesto por arquitectos, profesionales con experiencia en diseño espacial, diseño de exposiciones, diseño de contenido, producción multimedia y diseño gráfico.

Tienen más de 15 años de experiencia en el campo de la cultura y el entretenimiento. Entre sus proyectos más destacados se encuentran el Pabellón Saudí en la Expo 2020 de Dubái, el Museo Arqueológico de Estambul, la Colección del Tesoro de Topkapi y el nuevo Centro Richard Gilder para la Ciencia y la Educación en el Museo Americano de Historia Natural. En Zaragoza, llevó a cabo el Pabellón de Aragón y de Acciona en la Expo 2008 y el Museo Diocesano de la plaza de la Seo, junto a BAU.