Protección Civil del Gobierno de Aragón lanza una guía para el uso seguro de chimeneas ante el inicio del invierno

Protección Civil del Gobierno de Aragón ha puesto en marcha una nueva iniciativa para reforzar la seguridad en los hogares aragoneses coincidiendo con la llegada del invierno. La medida responde a los 185 incendios registrados en viviendas con chimenea en Aragón durante los dos últimos años, una cifra que evidencia la importancia de extremar la precaución y adoptar hábitos seguros en el uso de sistemas de calefacción tradicionales.

Con este propósito, se ha elaborado una guía informativa que reúne recomendaciones prácticas para el mantenimiento, revisión y encendido seguro de chimeneas, así como un listado de verificación destinado a facilitar su puesta a punto antes del inicio de la temporada de uso. Este material se ha remitido especialmente a los ayuntamientos y comarcas de Pirineos, Gúdar-Javalambre y Cinco Villas, territorios con una mayor presencia de este tipo de instalaciones.

La iniciativa busca reducir la incidencia de accidentes domésticos y promover la cultura de prevención y responsabilidad compartida. Para ello, Protección Civil solicita la colaboración de las administraciones locales en la difusión de la guía a través de los canales municipales disponibles, como son tablones de anuncios, páginas web, redes sociales y otros medios de comunicación comunitarios.

Recomendaciones básicas para un uso seguro de chimeneas

Antes de encender la chimenea:

• Comprobar que no existen grietas ni agujeros en la chimenea ni en los conductos.

• Limpiar el hollín del conducto de humos.

• Asegurar que la estancia cuenta con ventilación adecuada.

• No modificar la instalación sin contar con el asesoramiento de un técnico especialista.

• Se recomienda instalar un detector de humos.

¿Cómo debo encender la chimenea?

• Calentar la chimenea poco a poco, especialmente si ha estado mucho tiempo sin uso y los materiales están fríos.

• No emplear materiales inadecuados que puedan generar chispas o gases, como:

o Líquidos inflamables para encender o avivar el fuego.

o Leña húmeda, verde o resinosa.

o Madera tratada, que desprende productos tóxicos.

• No sobrecargar la chimenea: el fuego debe ser vivo, pero con la cantidad justa de leña para asegurar un buen tiro.