Vicepresidencia de Presidencia, Economía y Justicia
La economía aragonesa continúa creciendo a buen ritmo en el arranque del año 2025, con un buen comportamiento del mercado de trabajo y una inflación relativamente moderada
En el primer trimestre de 2025 el PIB de Aragón aumentó un 2,9% anual, con una tasa de paro situada en el 8,3% de la población activa
Las perspectivas para la economía mundial se han ido ensombreciendo a lo largo del primer semestre de 2025, fundamentalmente como consecuencia de la errática política económica desplegada por la nueva administración Trump en Estados Unidos, que ha traído consigo un repunte excepcional de la incertidumbre, provocando inestabilidad en los mercados financieros y amenazando con distorsionar gravemente el comercio internacional.
En consecuencia, las previsiones de crecimiento han sido severamente revisadas a la baja de forma sucesiva por la OCDE en marzo, por el FMI en abril y de nuevo por la OCDE en su último informe de Perspectivas Económicas, publicado el pasado día 3 de junio. Así, la OCDE espera una desaceleración del crecimiento mundial, que pasará del 3,3% anual en 2024 al 2,9% anual tanto en 2025 como en 2026, ritmos históricamente muy bajos. Esta desaceleración se concentrará sobre todo en Estados Unidos, Canadá, México y China, mientras que en otras economías el ajuste a la baja será menos pronunciado.
El balance de riesgos aparece más escorado a la baja. Una mayor fragmentación del comercio mundial, con nuevas subidas de aranceles y medidas de represalia, intensificaría la desaceleración del crecimiento y provocaría graves alteraciones en las cadenas de suministro globales. La inflación podría ser más persistente de lo previsto, lo que conduciría a una política monetaria más restrictiva y debilitaría las perspectivas de crecimiento.
En sentido positivo, una eventual marcha atrás de las barreras comerciales impulsaría las perspectivas de crecimiento mundial y aliviaría la inflación. Una resolución pacífica de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, así como de los conflictos en curso en Oriente Medio, mejorarían la confianza y estimularían la inversión.
En este contexto, la economía aragonesa y la española perdían tracción en el arranque de 2025, aunque continuaban creciendo a un ritmo muy apreciable y por encima del promedio de la eurozona, con el soporte de una vigorosa demanda interna apoyada a su vez en un buen comportamiento del mercado de trabajo.
Crecimiento del PIB de Aragón
En el primer trimestre del año el PIB de Aragón aumentaba un 2,9% anual, tasa similar al 2,8% anual anotado por el conjunto de España. El mercado de trabajo acompañaba al aumento de la producción, con un incremento del empleo del 0,8% anual en Aragón y del 2,4% anual en el conjunto de España, de acuerdo con la Encuesta de Población Activa (EPA) del INE. Con ello, la tasa de paro se situaba en el 8,3% de la población activa en Aragón y el 11,4% de la población activa en el promedio nacional.
La inflación aceleraba transitoriamente debido a la energía, con una tasa media en invierno del 2,8% anual en Aragón y del 2,7% anual en España. No obstante, en primavera volvía a moderarse, quedando en mayo en el 2,0% anual en España y el 2,2% anual en Aragón. Descontando la energía (y los alimentos no elaborados), la inflación subyacente seguía dibujando una senda de desaceleración, situándose en media del primer trimestre del año en el 2,2% anual, tanto en Aragón como en el conjunto de España.
Los indicadores parciales de actividad disponibles para el segundo trimestre de 2025 sugieren que la economía aragonesa y española mantienen un tono dinámico, aunque algo menos vigoroso que en el trimestre anterior, en un contexto de fuerte incertidumbre y desaceleración global. Por último, las Notas de Economía Aragonesa se dedican a la reciente mejora de la Calificación de la deuda de Aragón y a los Datos de inversión extranjera en 2024 en Aragón.
El Boletín Trimestral de Coyuntura puede consultarse en la siguiente página web: