TERUEL Y ZARAGOZA SE INCORPORAN AL PROGRAMA DE DETECCIÓN PRECOZ DEL CÁNCER DE MAMA
El Gobierno de Aragón y el Insalud desarrollan esta iniciativa, dirigida a todas las mujeres de 50 a 64 años residentes en nuestra Comunidad Autónoma, cuyo objetivo es reducir la mortalidad causada por esta enfermedad.
Zaragoza, 16/4/99 (JMG).- Fruto de la cooperación del Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Trabajo del Gobierno de Aragón y del Insalud, el próximo día 26 se inicia en las provincias de Teruel y Zaragoza el Programa de Prevención del Cáncer de Mama que, dirigido a las mujeres de 50 a 64 años residentes en nuestra Comunidad Autónoma, tiene como finalidad reducir la mortalidad por esta dolencia. En el programa colaboran las diputaciones de Teruel y de Huesca, provincia en la que comenzó el programa a finales de 1996. En total, 113.000 mujeres podrán beneficiarse de esta iniciativa en nuestra Comunidad Autónoma.
La estimacion de la población femenina que puede participar en las provincias de Teruel y Zaragoza durante los próximos años es de 89.800 mujeres, si bien se espera que realmente lo hagan alrededor de 71.800. Por la experiencia obtenida en la provincia de Huesca, previsiblemente requerirán pruebas adicionales (recribado) 7.200 mujeres, y se calcula que serán casi 900 las derivadas a los servicios hospitalarios para seguir tratamiento. Se prevé, que, en la primera ronda completa, los cánceres detectados no llegarán al medio millar.
La población máxima que se invita a participar en la primera fase es de 41.250 mujeres. De ellas, 19.800 se asignan a la unidad móvil y 21.450 a la unidad fija (situada en el Servicio Provincial de Sanidad de Zaragoza). Esto representa una cobertura poblacional global aproximada del 46%, siendo del 52% la correspondiente a la unidad móvil y del 41% a la unidad fija.
El programa comprende las fases de cribado, recribado, diagnóstico y tratamiento. El cribado consiste en la realización de una encuesta clínico-epidemiológica y una mamografía bilateral de doble proyección: oblicua medio-lateral y cráneo-caudal.
Los resultados "no negativos" dan lugar a una nueva cita (recribado) para practicar pruebas complementarias (radiológicas y ecográficas). Caso de confirmarse la sospecha, se pasa a las fases de diagnóstico y tratamiento en unidades hospitalarias. Los hospitales participantes en el programa son: Barbastro y San Jorge de Huesca; Calatayud, Miguel Servet y Clínico Universitario de Zaragoza; Alcañiz y Obispo Polanco de Teruel.
El cáncer de mama es el más frecuente en la mujer y una de las principales causas de mortalidad prematura. Hoy por hoy las posibilidades de prevención primaria son escasas, pero esta enfermedad si que puede prevenirse de forma secundaria; es decir, detectarse y tratarse en una fase temprana, de tal modo que las intervenciones terapéuticas sean menos agresivas y la supervivencia más alta.
Por ello, los expertos aconsejan la organización de programas de cribado poblacional mediante mamografías periódicas, prioritariamente dirigidos a las mujeres de entre 50 y 64 años. Con ellos, tras algunos años, puede reducirse hasta un 30% la mortalidad de la población sometida a dicho cribado.
El programa de detección precoz de cáncer de mama consiste en la citación bienal de todas las mujeres de 50 a 64 años para la realización de una prueba de cribado: mamografía bilateral en doble proyección (4 radiografías por mujer). La prueba se lleva a cabo en distintas unidades de cribado (fijas o móviles) por técnicos especialistas en radiodiagnóstico. Las unidades móviles se desplazarán por el territorio de la Comunidad Autónoma para facilitar el acceso de las mujeres al programa.
El programa se implanta progresivamente. Se citará sucesivamente a las mujeres residentes en una zona de salud hasta completarla y pasar a otra. Antes de iniciar el cribado en una zona se contactará con el Equipo de Atención Primaria, el Consejo de Salud, los ayuntamientos, y las entidades y asociaciones comunitarias.
En primer lugar se envía una carta y un folleto informativo a cada mujer para presentarle el programa y recordarle que será citada en breve. Posteriormente, se recibe otra comunicación con la indicación del lugar, día y hora para efectuar las mamografías. En ella se explica la sencillez y gratuidad de la prueba. Se proporciona también un teléfono para obtener información (si lo desea) y (en su caso) solicitar cambios en la fecha y hora asignado para la cita.
La unidad móvil se traslada al municipio cabecera de cada zona de salud, donde se monta y queda instalada (si es posible junto al centro de salud) mientras dura el cribado de la zona. Las mujeres que acuden a estas unidades aguardan en una sala de espera hasta que son llamadas para hacerse las mamografías y abrir una historia que recogerá los antecedentes personales y familiares de interés. Posteriormente, deberán aguardar unos minutos en la sala de espera (mientras se procede al revelado de la placa y se verifica que es correcta para su interpretación) hasta que se les indique que pueden marcharse. Las mujeres que no acudan a la primera cita volverán a ser citadas unos días después.
Ya sea tras la mamografía de cribado o tras las pruebas de imagen adicionales, si existe una sospecha de cáncer de mama se procede a la citación de la mujer en la Unidad de Mama o en el servicio previamente decidido para cada hospital, con objeto de llevar a cabo la confirmación del diagnóstico. Esta cita será solicitada por la coordinadora provincial del programa al servicio de admisión del hospital del que se trate, y le será comunicada a la mujer por carta y telefónicamente. El plazo máximo para la primera consulta hospitalaria será de 10 días desde la solicitud de la cita.
Una vez finalizado el proceso diagnóstico, si se descarta cáncer, la mujer será remitida de nuevo al programa para la continuación del seguimiento. Si se diagnostica cáncer de mama se procederá al tratamiento, de acuerdo al protocolo establecido, en un plazo máximo de 30 días desde la primera consulta hospitalaria.
El cáncer de mama en Aragón
Según el Registro de Cáncer de Zaragoza el cáncer de mama es la localización más frecuente de esta dolencia en la mujer, y representa algo más del 22% de todos los tumores registrados en la provincia.
Los últimos datos disponibles sobre mortalidad en Aragón, referidos a 1995, muestran que hubo 225 defunciones de mujeres por esta causa, lo que ofrece una tasa ajustada por edad de mortalidad, por cada 100.000 mujeres y año, de casi 25 fallecimientos. Si se estudia el impacto de la mortalidad en los diferentes grupos de edad, se observa que las tasas aumentan con ella. Entre los 50 y 69 años se dan el 40% aproximadamente de todas las defunciones.
La tendencia de la evolución de la mortalidad por cáncer de mama en Aragón era ascendente hasta 1989, momento a partir del cual se inicia una disminución con algunos altibajos, al tiempo que la tasa de mortalidad en España experimenta un aumento progresivo, excepto en 1994, año en que desciende ligeramente. En los últimos años se sitúa por encima de la aragonesa.