Economía
El CESA identifica cuatro claves capaces de transformar la realidad de Aragón: inmigración, tecnología, formación y vivienda
El Consejo Económico y Social de Aragón (CESA) ha aprobado en su sesión plenaria de hoy el informe anual sobre la situación económica, laboral y social de Aragón en 2024.
Inmigración, tecnología, formación y vivienda. Éstas son las cuatro claves para la transformación de Aragón identificadas en el informe anual del Consejo Económico y Social de Aragón de 2024 ha aprobado hoy por unanimidad en la sesión plenaria del organismo. Un ejercicio en el que la economía aragonesa se aceleró con un crecimiento sostenido (3,2% de promedio anual), en el que todos los sectores productivos presentaron tasas de crecimiento por encima del 5%, excepto el sector servicios, que marcó un 2,6%.
En el ámbito laboral, en 2024, por cuarto año consecutivo, ha crecido la población ocupada en Aragón, hasta las 620.000 personas, y se ha reducido el número de personas desempleadas, hasta dejar la tasa de paro en el 8,1%, con tendencia a aproximarse hacia el pleno empleo. Los principales desafíos actuales son el paro de larga duración (un 36% del total de personas desempleadas), el rebote de la temporalidad, la parcialidad (un 22,4% entre las mujeres y solo un 4,6% entre los hombres) y la mejora de la tasa de empleo juvenil (un 30,4%).
En el ámbito social Aragón mantiene un nivel de vida superior a la media nacional (la renta media de los hogares ha crecido un 7%), aunque algunos indicadores como alimentación, vivienda y hostelería no han mostrado mejora debido al incremento del coste de vida. En la sociedad aragonesa hay menos desigualdad que en la media nacional (el índice de GINI es 27,1 frente al promedio español de 31,2) y el riesgo de pobreza y exclusión social es muy inferior al nacional (21% frente al 25,8%).
Claves para transformar la realidad aragonesa
El Informe incluye un capítulo final, “Claves para transformar la realidad aragonesa”, en el que se incluyen reflexiones y sugerencias para mejorar el futuro de Aragón en cada uno de estos ámbitos: económico (como diversificación, I+D+i, agilización administrativa o digitalización), laboral (mejora de la empleabilidad, retención de talento, relevo generacional) y social (mejora del sistema sanitario, inversión en educación, cobertura del sistema de prestaciones sociales).
Como novedad, el CESA ha identificado cuatro ámbitos con capacidad para generar transformaciones importantes en el futuro de Aragón, y en los que propone aplicar políticas transversales coordinando la acción de los departamentos del Gobierno de Aragón y el resto de administraciones públicas. Estos ámbitos son:
- Inmigración: hay que entenderla como fuerza laboral y como parte del tejido social, con refuerzo hacia la integración por parte de la sociedad de acogida y también de las personas que son acogidas.
- Tecnología: aprovechar la llegada de grandes empresas tecnológicas y la implantación de centros de datos para mejorar nuestro ecosistema tecnológico y empresarial y fomentar el empleo cualificado.
- Formación: seguir reforzando la formación profesional, apostar por una cultura del talento y revertir las brechas de género que todavía existen.
- Vivienda: actuar sobre la oferta de vivienda, y sobre las condiciones de acceso, aprovechando para constituir parques públicos de vivienda y respaldar a los colectivos más necesitados de apoyo.
El Informe del CESA concluye llamando la atención de los poderes públicos aragoneses sobre la incertidumbre mundial en los primeros meses de 2025, por los varios conflictos, las políticas arancelarias y la inestabilidad de los mercados de recursos claves, y la necesidad de estar preparados para reaccionar de modo inmediato.