Banco de Sangre
El Hospital Universitario Miguel Servet acoge con éxito una jornada de donación de sangre en el vestíbulo de Trauma
El Banco de Sangre ha incorporado a toda la red hospitalaria de Zaragoza en su programación de donaciones de este verano
Se recuerda a la ciudadanía que el Servet dispone de un punto fijo de donación de sangre en la planta 4ª del edificio de consultas externas
El punto de donación de sangre itinerante del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón se ha trasladado hoy al Hospital Universitario Miguel Servet, concretamente al vestíbulo de Trauma, donde familiares de pacientes y profesionales sanitarios se han acercado a participar en esta acción solidaria.
En total, 40 personas han donado sangre en los seis puestos habilitados, lo que supone una importante contribución en una época en la que las reservas de sangre tienden a descender debido a las vacaciones estivales.
María Murillo, enfermera de práctica avanzada en hemovigilancia del Hospital Universitario Miguel Servet, ha subrayado que “la sangre no se puede fabricar, ni tampoco almacenar durante mucho tiempo. Solo puede proceder de personas solidarias que deciden donar”. Además, ha añadido, “es imprescindible en muchas situaciones: en cirugías, en accidentes, en el tratamiento de enfermedades como el cáncer. Por eso, cada donación cuenta y puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte para alguien”.
María Murillo animo a la donación de sangre
La jornada ha contado con la implicación del personal sanitario y con el respaldo del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón, cuyo objetivo es sensibilizar a la población sobre la importancia de la donación. “Este tipo de iniciativas permiten acercar la posibilidad de donar a los propios entornos hospitalarios, facilitando la participación tanto de los profesionales como de las familias de los pacientes”, han señalado desde la organización.
Con este tipo de actividades, el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón busca reforzar los puntos de extracción en verano, época en la que la disponibilidad de donantes desciende, pero la necesidad de componentes sanguíneos se mantiene constante.