title.site title.site

Viernes, 17 de mayo de 2024

Más de 23 millones de envases han sido dispensados en Aragón con el Sistema de Receta Electrónica

Receta Electrónica

Una cifra que avala el buen funcionamiento de la e-receta desde su implantación en febrero del 2012 además de continuar funcionando a pleno rendimiento en las tres provincias aragonesas”

Tener control exhaustivo y preciso por parte del personal sanitario de los medicamentos y cantidades que el paciente necesita. Con esta finalidad, el departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón comenzó a instaurar el sistema de la receta electrónica en febrero del año 2012 en los diferentes sectores sanitarios.

El consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia, Ricardo Oliván, sobre la receta electrónica

Un proceso de implantación que se ha ido realizando de forma paulatina y que culmina con su funcionamiento a pleno rendimiento ya que se han retirado un total de 7.747.609 de recetas electrónicas en todo Aragón y se han producido más de 23 millones de dispensaciones en 738 farmacias aragonesas.

Así, se han dispensado recetas electrónicas en 128 farmacias de la provincia de Huesca, 108 de la provincia de Teruel y 502 de la provincia de Zaragoza. A ello se une su uso en 765 consultorios y 122 centros de salud así como su dispensación a más del 70% de la población aragonesa.

Un sistema eficaz y seguro

La conocida como e-receta fue puesta en marcha por el departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno Aragón a finales de febrero de 2012 cuando se inauguró en Cariñena (Zaragoza), y después de ponerse en marcha en 21 zonas de salud del medio rural, se inició en Zaragoza ciudad, en concreto en Valdefierro y Parque Goya.

Desde entonces, se ha ido instaurando en las diferentes zonas básicas de salud aragonesas con la finalidad de consolidarse como un sistema cómodo y seguro de prescribir y dispensar los medicamentos que permite un gasto farmacéutico ajustado al consumo real ya que sólo se dispensan los medicamentos que necesita el paciente.

Además, se trata de un sistema cuyas ventajas se materializan en la eliminación de trabajo burocrático para los facultativos de atención primaria, el aumento de la seguridad del paciente, ya que el sistema valida que la dispensación es correcta, la incorporación del farmacéutico como un agente de salud y la eliminación de las visitas innecesarias del paciente a buscar recetas a los centros de salud.